La piedra es probablemente uno de los acabados más sufridos tanto para cerramientos constructivos, interiores, escaleras, bancadas o quizá dispongas de un bonito jardín decorado con alguna escultura a la intemperie.
En cualquiera de los casos, el paso del tiempo y las condiciones climatológicas van deteriorando el aspecto visual de este material y necesita ser renovado.
Dependiendo de la superficie a tratar, se puede aplicar chorro de agua caliente o arena a presión para eliminar cualquier impureza. En otros casos se necesitará mas sutileza por lo delicado del objeto o superficie afectada.
En
cualquiera de ellos daremos unas pequeñas pautas a seguir para la
preparación de materiales como:
mármol,
granito, arenisca y pizarra si no vas a contratar a profesionales
especializados.
LAVADO
Limpiaremos
con una solución jabonosa con un paño o bayeta. Frotaremos con
intensidad con un cepillo duro empapado en lejía para eliminar polvo, musgos, líquenes, esporas o cualquier tipo de microorganismo, en exteriores.
REPARACIÓN
Rellenaremos
grietas y agujeros con masilla universal y en algunos casos podremos
añadir a esta, tinte del color lo más aproximado posible a la
muestra a tratar.
IMPRIMACIÓN
Cuando
se trata de realizar algún tipo de técnica de pintura decorativa (
estarcidos, mano alzada, aerografiados, etc), será necesario dar una
imprimación para un perfecto agarre de los productos que vayamos a
utilizar sobre este tipo de soporte.
Al
agua: Aplicaremos una capa de barniz sellador tapa poros y dejar
secar 16h, a continuación aplicaremos una capa de imprimación
acrílica y dejamos secar 2h.
Al
aceite: Aplicaremos una capa de barniz sellador tapa poros y dejar
secar 16h.
PINTURA
BASE
Al
agua: No será necesario
Al
aceite: Aplicar pintura base al aceite y dejar secar 16h.
Ahora
ya tendremos preparada la superficie para realizar cualquiera de los
estilos pictóricos elegidos para nuestra futura decoración.